Brasil - 6
Argentina - 8
Brasil: Manute m.30, Michel, Carlos, Adrián, Rubén y Josué
Argentina: César, Chechu, Luisman, Laury, Ramón y Manute m.30
En un partido muy parejo, los argentinos supieron sacar mejor provecho de los minutos que jugaron con un hombre más. No es que los brasileños desaprovecharan esa ventaja en la primera mitad del encuentro, pero para el resultado final fueron más importantes los últimos minutos.
Tarde desapacible en La Albericia pero ni mucho menos la peor tarde para jugar al fútbol del último mes. Incertidumbre hasta el último minuto para saber si se jugaba el partido o no. Al final tiramos de Adrián para completar un paupérrimo 5 contra 5 y 30 segundos después apareció Carlos para volver a desequilibrar las fuerzas siendo 11 futbolistas sobre el terreno de juego
Hubo voces que pidieron la retirada de Adrián del campo pero la misma no se llevó a cabo. Bastante hace el chaval jugando cuando estamos jodidos como para decirle que lo deje cuando no nos venga bien. Así que se decidió jugar 6 contra 5 y a joderse.
Como no podía ser de otra forma, el equipo que contaba con uno más se erigió en el dominador absoluto del partido. En este caso fueron los brasileños los que, aprovechando su ventaja numérica, se adelantaron en el marcador y llevaron el peso del partido.
Tanto era el lógico dominio de unos y el esfuerzo que se veían obligados a realizar los otros, que el portero brasileño avisó de que a la mitad del partido iba a cambiarse de equipo para que todos tuvieran la oportunidad de ser uno más.
Los goles fueron cayendo del lado brasileño por la propia inercia del paso del tiempo. Hasta que se llegó al 5-1 del “descanso”. En ese momento se cambiaron las tornas y Manute pasó de defender la portería local a engrosar las filas argentinas.
El cambio no se hizo esperar y los argentinos se lanzaron a por la remontada. Había tiempo suficiente para ello y a pesar de que no lo hicieron todo lo ordenadamente que debieron, al final lo lograron.
Pero no fue fácil. Argentina empujaba más con el corazón de Ramón que con la cabeza de Manute o Chechu. El equipo seguía siendo muy anárquico tácticamente, aunque ser uno más disimulaba esas carencias.
Brasil de defendió bien. Incluso Michel marcó un gol que dio esperanzas a los suyos de salvar el resultado. Por cierto el mejor gol del día, con un toque con el exterior desde fuera del área que se introdujo en la portería de César por la escuadra.
Pero el físico abandonó a los brasileños en la recta final del partido y argentina acabó por darle la vuelta al marcador. A Brasil solo le quedaba la pelea de Rubén contra el mundo y eso era demasiado para cualquiera. Ninguno de sus compañeros estaba ya para aguantar el ritmo que requería correr el campo arriba y abajo una y otra vez para neutralizar el alocado y poco ortodoxo ataque de los argentinos.
Al final el resultado fue lo de menos. La deportividad presidió la retirada de los jugadores al vestuario y todos se felicitaron por haber podido jugar una semana más aunque fuese con los justo.
EL CRACK: César. Estuvo muy bien en dos estiradas que salvaron dos goles cantados brasileños y sobre todo en un espectacular despeje en plancha con la cabeza al ser plenamente consciente de que estaba fuera del área y plenamente inconsciente de lo que se podía haber roto al caer sin manos.
EL DANDY: Michel. A pesar de que el aire ya no le llegaba a los pulmones, o precisamente por eso, se anotó el mejor gol del partido con una vaselina desde 20 metros con el exterior de su pierna izquierda. Un auténtico lujo para un jugador en progresión ascendente.
EL DURO: Chechu: las únicas faltas por entradas “duras” que se pitaron en todo el partido fueron las suyas. Quizás sea porque es un jugador violento o porque el resto no llegamos ni a molestar a los rivales. El caso es que a juicio de los que recibían (pitaban) las faltas, fue merecedor de al menos la cartulina amarilla y al final se fue de rositas.
5 comentarios:
Si llego a intentar meter un gol con el exterior de la pierna izquiera me doy una ostia que me mato.
Ah! perdón, que querías decir que mis dos piernas son izquierdas, en ese caso ¡vale!
No te quites méritos. De todas formas si que fue con la derecha. pero era de noche y fue tan bonito que me confundiste con el escorzo y pensé que la habías colocado en la escuadra con la derecha
lo del sueño al ser padre ,no venia en los manuales...!!!!es la hostia!!!!!
Anónimo cabrón no te rias del mal ajeno, que ya te llegará........
Fdo. Michel.
Michel que no se ríe. Que es Rubén que lleva sin pegar ojo desde que es papá.
Está jodido!! y encima Chechu le da patadas. No tenemos corazón
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